En 1994, A.G.NA.DE.N. adquirió tres hectáreas de terreno en el borde noroeste del Humedal de Padul con el objetivo de proceder a su restauración vegetal. En aquella época la Turbera del Aguadero mantenía los niveles de agua muy bajos y sólo se mantenía encharcado el Ojo Oscuro y un área de carrizal al oeste de la explotación de turba (Foto 1).
Foto 1 . Aspecto del área del Aguadero en 1993, cuando la explotación de turba controlaba los niveles de agua y las superficies encharcadas. Se marcan lasparcelas adquiridas por AGNADEN en 1994 en el borde norte del carrizal. Fotografía aérea: Consejería de Medio Ambiente ( J . A. Martín-Vivaldi).
Decidimos comprar terrenos de cultivo abandonados y herbazales en el margen del carrizal (parcelas marcadas en Foto1).Esta solución nos permitía simultáneamente preservar las zonas encharcadas, pues se controlaría una franja perimetral del carrizal dificultando el acceso, y realizar una experiencia piloto de restauración de las comunidades vegetales riparias cuyos resultados fueran extrapolables al resto de la Laguna.
Se plantaron en estos terrenos más de 3000 plantas de 22 especies, intentando reproducir las asociaciones de vegetación potencial de la zona (Mimbrera, Alameda-Fresneda y Olmeda según su proximidad al agua, Foto 2).
Después de varios incendios ocurridos en los primeros años tras las repoblaciones, sobrevivieron las especies mejor adaptadas a rebrotar tras el fuego, como las diversas especies de mimbres (Salix sp.) álamo blanco (Populus alba), taray (Tamarix africana), fresno (Fraxinus angustifolia) y majuelo (Crataegus monogyna).
Fotos 3, 4 El bosque de ribera plantado por AGNADEN ya es una formación madura y crece en galería sobre la senda del Álamo.
De bosque perimetral a laguna somera
En el año 2010 se consiguió finalmente la paralización de las extracciones de agua por parte de la turbera del Aguadero, lo que llevó a una transformación espectacular del humedal de Padul, alcanzando los niveles de agua que de forma natural deberían estar presentes dado el actual sistema de drenaje que forman las madres.
Gracias a ello se ha logrado una gran extensión de laguna profunda de aguas abiertas (Foto 5), y los herbazales se han inundado evolucionando hacia carrizales y eneales encharcados o lagunas de aguas abiertas someras.
Foto 5. Panorámica de la zona del Aguadero tras la inundación del año 2010.
Los terrenos sobre los que creció nuestro bosque se han mantenido en gran parte encharcados desde entonces, lo que ha causado que muchos árboles se sequen, aunque los situados en los bordes de las zonas encharcadas siguen formando un denso bosque ya de notable altura. En el año 2014, AGNADEN ha trabajado en las áreas de más profundidad para retirar los árboles secos, despejando así las lagunas someras de la Reserva del Álamo (Foto 6).
Foto 7. Con los troncos se han construido plataformas flotantes para favorecer a la fauna.
Fotos 8 y 9. Repoblación con lirios de agua y milhojas.
Nuestra forma de trabajo
Sostenibilidad
Todas nuestras intervenciones se planifican con un respeto absoluto de nuestro entorno.
Ética
Nos guian siempre los valores de honestidad, compromiso y responsabilidad.
Respeto
Nuestros proyectos son duraderos, sostenibles y respetan los tiempos de la naturaleza.
Ayer, hoy, mañana.
Creemos en fijar las bases de un pacto intergeneracional por la naturaleza.
Seguridad
Nuestros voluntarios reciben formación específica para disfrutar de nuestras actividades de una forma segura.
Huella Cero
Cuando salimos a la naturaleza, siempre dejamos los espacios visitados limpios y cuidamos de minimizar nuestro impacto.